
Pedagogía de la memoria: recuperación, organización y experiencias cooperativas de tejidos mapuches.
Tejedoras mapuches enfrentan un mercado artesanal precarizado. Cooperativas como Zuem Mapuche y la empresa estatal Artesanías Neuquinas buscan visibilizar su trabajo, asegurar precios justos y preservar esta tradición ancestral.
La venta de tejidos mapuches en su mayoría suele realizarse de manera informal sin que se considere el valor cultural de cada pieza ni el tiempo de trabajo que su elaboración implica; por ejemplo, de hilado, teñido y tejido. Por tratarse de una tradición transmitida de generación en generación, los tejidos se producen en hogares ubicados en zonas rurales o en parajes con poco acceso a las localidades urbanizadas y, por lo tanto, se dificulta la posibilidad de crear un circuito comercial o insertar las piezas tejidas en uno ya organizado.
Ante esta realidad y la necesidad de regularizar el mercado artesanal, existen experiencias cooperativas y otras con intervención estatal o estatales que pretenden: unificar el precio de las artesanías, organizar la distribución de los tejidos a las bocas de venta y, sobre todo, reconocer el valor cultural y el tiempo de trabajo que cada artesana o artesano transmite al elaborar sus piezas. En la Provincia de Río Negro, se ha formado la Cooperativa Zuem Mapuche constituida por artesanas y familias mapuches, y en la Provincia del Neuquén, Artesanías Neuquinas, una empresa estatal.
La Cooperativa Zuem Mapuche surgió como respuesta organizada y colectiva al impacto negativo, por la muerte de animales, que dejó la nevada del año 1984 sobre las economías familiares de la zona de Bariloche, la Comarca Andina y la Región Sur. A ello también se sumó la ceniza que cubrió la zona, proveniente de la erupción del complejo volcánico chileno Puyehue-Cordón Caullé en el año 2011.
La mortandad de ovejas y luego la sequedad de la lana por falta de lanolina, debido a la ceniza volcánica, demandaron acciones concretas de la cooperativa que terminó por organizar la compra del vellón hilado entre las y los hilanderos, además de la comprar y distribuir las producciones artesanales, sin la presencia de revendedores o intermediarios.
La cooperativa Zuem Mapuche tiene un solo local comercial donde comercializa la producción artesanal. El punto de venta está ubicado en la calle Moreno en el centro de la ciudad de San Carlos de Bariloche. Sanmartiniano, uno de sus integrantes, explica: “No permitimos teñidos, tienen que ser naturales y hechos a mano”. Y agrega: “El hilado también debe ser a mano. Hay una zona en Río Chico donde casi todos hilan a huso.”
Por otro lado, Artesanías Neuquinas es una empresa estatal que, desde su creación en el año 1974, promueve el trabajo artesanal de las comunidades mapuches ubicadas en el territorio provincial. Compra los trabajos de manera directa a las y los artesanos y, así, garantiza la procedencia y calidad de las piezas al revenderlas, a través de un certificado de autenticidad con nombre y lugar de procedencia.
Según la coordinadora del Taller de tejido Mapuche de la Municipalidad de Las Lajas, Rosa Gonzalez: “Artesanías Neuquinas es una gran cosa, porque nos hace un sueldo. Si llegaran a venir todos los meses, todos los meses tendríamos buen dinero, porque se llevan y se gana mucha plata con el tejido a telar mapuche. Pero ya van a ser como tres años que no vienen, así que no”.